Estigma

La teoría del etiquetado sostiene que cuando se juzga el comportamiento de una persona mediante una etiqueta, ésta es asumida por el sujeto para explicar y justificar su propio comportamiento. Esto provoca lo que se conoce como “profecía autocumplida”, que consiste en que el individuo desarrolla los comportamientos que le llevarán a confirmar la etiqueta (en caso contrario se produciría una disonancia cognitiva y un conflicto interno que debería ser resuelto por el individuo, y que en ocasiones se resuelve a través de la enfermedad mental). Además, esta situación produce el deterioro de la relación y provoca consecuencias indeseables para un buen ejercicio de la labor educativa.


La profecía autocumplida o Efecto Pigmalión
“Vivimos en un mundo
de creencias que se autogeneran
y no se cuestionan.
Adoptamos esas creencias
porque se basan en conclusiones,
las cuales se infieren de lo que observamos,
además de nuestra experiencia del pasado”
(Peter Senge )

Cuenta la mitología que Pigmalión era un príncipe de Chipre que, en busca de la mujer perfecta con quien casarse, comenzó a esculpirla en un trozo de piedra. Día a día fue dándole forma a esa roca para ir moldeándola según la imagen que el príncipe tenía de lo que una mujer perfecta debía ser. Logró finalmente una figura cuya belleza superaba aún a su propia imaginación. Dio a ésta el nombre de Galatea: era una escultura bellísima de la cual fue enamorándose. Al ver esto la diosa Venus dio vida a la estatua haciendo ciertos los deseos de Pigmalión.
Esta figura mitológica ha dado lugar a un concepto fundamental en psicología que fue observado por Robert Merton y que hace referencia a la idea de lo que un juicio puede lograr en la realización de un acontecimiento, dando lugar en muchos casos a la llamada profecía autocumplida. Es decir, se llama efecto Pigmalion al hecho de que los juicios y las predicciones que tenemos sobre las personas, cosas, situaciones e incluso sobre nosotros mismos tiendan a convertirse en realidad (en afirmaciones).
Dentro de las expectativas que generamos en el entorno, nos encontramos con atribuciones que otorgamos a los demás, en un intento de organizar nuestros pensamientos para que sean acordes con nuestro mundo. Estas atribuciones nuestras, influyen de una forma muy directa a la hora de las acciones que vemos factibles y permitimos como válidas en las relaciones que tenemos, toleraremos lo esperable y rechazaremos lo imprevisible. Con lo que al acotar en categorías a las personas estamos influyendo significativamente a que se comporten como tales.


Nos podemos imaginar como puede afectar a todo un colectivo poblacional, como es el que hemos elegido, que existan unas creencias poco flexibles y limitantes de sus posibilidades reales para poder acercarse a una vida normalizada. Sobre todo cuando esas creencias y mitos son sostenidos por los contextos en los que se tienen que desenvolver y por las personas cercanas con las que tienen que relacionarse y desarrollarse diariamente, y que en muchos casos forman parte de su identidad, siendo incluso sus modelos.